Nuestros valores empresariales
SAINT JAMES ha estado siempre vinculado a los valores de independencia, libertad y apertura al mundo.
Desde la creación en 1889 de las "Filatures de Saint-James'' hasta la transferencia de la propiedad de la empresa a sus empleados y altos directivos en 1990, todo se hace en interés común de la empresa y de su entorno económico y social.
Lejos de aislarnos, este espíritu de independencia nos ha permitido multiplicar las asociaciones y promover la marca a nivel internacional, manteniendo nuestra identidad.
Más de 130 años después de la creación de la primera hilandería en la ciudad de Saint-James, bajo la dirección de su antiguo alcalde, Léon Legallais, las oficinas y los talleres de la empresa han permanecido en la región. Nuestra marca se ha convertido en un auténtico abanderado de toda la región.
Normandía y sus tradiciones náuticas están en el corazón de nuestro ADN y nos empujan cada día a dar a conocer nuestro precioso patrimonio al mayor número de personas posible.
Al igual que los marineros viajeros que se embarcan en alta mar durante largos meses, tenemos espíritu de aventura y gusto por el descubrimiento.
Este descubrimiento es, en primer lugar, el de los nuevos horizontes, que hizo que Saint James fuera uno de los primeros fabricantes de ropa franceses en exportar a nivel internacional, asegurando su presencia en Japón ya en 1980.
Sin embargo, no consideramos que una exploración tenga éxito si no está motivada por el deseo de conocer a otros. Por tanto, nuestra aventura sólo puede ser rica y completa si se vive junto a usted, nuestros clientes, nuestros proveedores o nuestros socios.
Conocerte nos abre nuevos horizontes, nos da siempre nuevas ideas y un impulso para llevar a lo más alto la cultura marítima y el saber hacer ancestral que hemos heredado
Más que un espíritu de equipo, es un espíritu de tripulación que une a todos los que trabajan para la ropa SAINT JAMES y contribuyen a la influencia de la marca.
Nos embarcamos hace más de 130 años, rumbo al mismo destino, impulsados por una exigencia de calidad, modernidad y elegancia, respetando al mismo tiempo nuestra herencia marítima.
Día tras día, construimos una historia compartida en la que cada miembro de la tripulación desempeña un papel decisivo. A través del trabajo que realizan, las innovaciones que ponen en práctica y las ideas que aportan, los empleados de SAINT JAMES contribuyen a que nuestra marca mantenga el rumbo.
Cada día, tejemos y confeccionamos prendas de alta calidad, fieles a sus orígenes náuticos, al tiempo que refrescamos y actualizamos constantemente su diseño. Desde el atuendo de trabajo de los pescadores bretones hasta la ropa casual chic, ponemos nuestra creatividad al servicio de la elegancia y defendemos nuestra originalidad sin perder autenticidad.
Las prendas SAINT JAMES forman ya parte de la historia de las familias, que las descubren generación tras generación. Estas prendas son símbolos de un saber hacer ancestral y testimonios de una memoria colectiva transmitida a través de los recuerdos de las vacaciones de verano junto al mar.
Para nosotros, la elegancia y la sencillez no se oponen, sino que se complementan y se unen para dar vida a la ropa Saint James, año tras año, colección tras colección. La elegancia y la sencillez son dos palabras que están en el corazón de nuestro saber hacer, así como las habilidades interpersonales que son esenciales para el éxito de nuestra empresa.